Gastón Fossati, director de ARBA, explicó que "buscamos reemplazar de forma gradual la boleta en papel por un servicio digital mucho más eficiente, que aproveche al máximo las posibilidades que nos brinda la tecnología, evite los inconvenientes de la distribución postal y cuide el medioambiente".
La iniciativa prevé modificar la forma de envío de los impuestos, prescindiendo del papel, los mecanismos de impresión y el reparto tradicional de correspondencia, y reemplazar todo eso por un servicio de boleta tributaria que llega al mail de cada contribuyente.
"Nuestro objetivo es seguir sumando vecinos al sistema de envío por correo electrónico y al resto de las opciones que ofrecemos por internet, para que tanto el acceso como el pago de la boleta pueda hacerse por medios digitales. Así, ahorramos recursos que son de todos y fomentamos una relación más eficiente y directa con el contribuyente, acorde a los tiempos que corren", subrayó Fossati.
El proceso de transformación para dejar de imprimir las boletas de los impuestos Inmobiliario, Automotores y Embarcaciones y avanzar hacia un esquema digitalizado comenzó en los primeros meses de este año con aquellos contribuyentes que ya se vinculaban con ARBA de manera electrónica.
Al inicio de esa transición, se dejaron de emitir 1.555.341 boletas de papel que correspondían a usuarios del Domicilio Fiscal Electrónico y otras 606.869 de quienes voluntariamente se habían adherido al servicio por mail.
En el último mes la medida se extendió a otras 862.302 boletas, abarcando a contribuyentes que tributan Ingresos Brutos, empresas que actúan como agentes de recaudación, multipropietarios que pagan el Impuesto Complementario y personas físicas o jurídicas que tienen a su nombre más de 10 bienes, ya sean vehículos, inmuebles o embarcaciones.
Este proceso continuará en la segunda mitad del año con la incorporación de nuevos adherentes al servicio de boleta por mail que, además de brindar acceso a las liquidaciones tributarias a través del correo electrónico, actúa como recordatorio de vencimientos y bonificaciones.
Para profundizar las vías de contacto digital con el contribuyente, ARBA mejoró la plataforma de servicios que ofrece por internet y desarrolló otras herramientas web para celulares, tabletas y computadoras que facilitan el pago electrónico de impuestos, evitando el uso de dinero en efectivo, así como la necesidad de imprimir comprobantes.