Esta iniciativa, que suma a la prohibición del uso de bolsas de polietileno no biodegradable y biodegradable aprobada en 2013, conllevó previamente una reunión con titulares de Paradores de Playa y se extenderán a lo largo del mes con el resto de los comercios que entregan sorbetes plásticos.
La nueva ordenanza, Nº 2636, busca "erradicar los residuos que en mayor medida se encuentran en la playa" teniendo en cuenta los resultados obtenidos en el censo de Basura en las playas de la Provincia de Buenos Aires, de 2017, que arrojaron como resultado que en 1.2 millones de metros cuadrados de playa, fueron recolectados casi cuarenta mil residuos no orgánicos, de los cuales el 82 % corresponde a plásticos".
La nueva norma expresa que "para poder lograr una "playa limpia", libre de residuos y contaminación, es necesario: por un lado, generar políticas ambientales tendientes a evitar que la playa se contamine; y por otro lado, continuar con la limpieza consciente por parte del Municipio, siendo fundamental identificar qué basura hay, para poder cambiar nuestros hábitos de consumo y revertir está contaminación"
"El incumplimiento o trasgresión a la presente ordenanza hará pasible a los titulares de comercios infractores, la aplicación de sanciones que implican como primera medida un apercibimiento y luego multas que ascienden desde los 5 mil a los 10 mil pesos y el decomiso de sorbetes.