El intendente Mario Secco encabezó el acto, recordando con afecto a Francisco, quién había enviado su bendición para la inauguración del Cementerio en 2017. “Fue una alegría grande cuando nos visitó por este trabajo. Creo que interpretó lo que queríamos hacer nosotros al construir este lugar: que todos seamos iguales, que descansemos sin lujos y en las mismas condiciones”.
Además, agregó: “A pesar de su poder, nunca perdió la sencillez, rechazando los lujos del Vaticano. Fue terrenal, defensor del Pueblo, rebelde, predicador de la paz y el amor por el prójimo y por los más vulnerables. Estamos muy agradecidos por el compromiso que lo ha caracterizado”.
El acto fue acompañado por una misa presidida por el Parroco Marcelo Tolosa. También participaron fieles de la Iglesia, vecinos, funcionarios municipales, concejales y consejeros escolares.